SEMANA SANTA

DOMINGO DE RAMOS

SEMANA SANTA. DOMINGO DE RAMOS. 14 DE ABRIL

(Hoy domingo de Ramos en el evangelio de la Eucaristía se lee todo el relato de la pasión de Jesús según San Lucas. Si quieres coge el evangelio, busca el evangelio de San Lucas y lee entera la pasión y muerte de Jesús.

Aquí solo ponemos el dialogo de Jesús con uno de los malhechores que estaban crucificados al lado de Jesús). 

Lucas 23

³⁹Uno de los malhechores crucificados lo insultaba, diciendo:

S: ¿No eres tú el Mesías? Sálvate a ti mismo y a nosotros.

C ⁴⁰Pero el otro, respondiéndole e increpándolo, le decía:

S: ¿Ni siquiera temes tú a Dios, estando en la misma condena? ⁴¹Nosotros, en verdad, lo estamos justamente, porque recibimos el justo pago de lo que hicimos; en cambio, este no ha hecho nada malo.

C ⁴²Y decía:

S: Jesús, acuérdate de mí cuando llegues a tu reino.

C ⁴³Jesús le dijo:

S: En verdad te digo: hoy estarás conmigo en el paraíso.

MURIÓ COMO HABÍA VIVIDO

Como se dice más arriba, hoy en la Eucaristía se lee todo el relato de la Pasión de Jesús. Aquí, ponemos solo el diálogo que Jesús mantiene con uno de los malhechores que estaban crucificados junto a él.

Veamos algunos aspectos de este domingo y de este relato.

-         Hoy es Domingo de Ramos. Se celebra la entrada de Jesús en Jerusalén, en la cual sus discípulos y algunas gentes cogieron palmas para recibir a Jesús, a su llegada. Aquellas gentes pensaban que Jesús iba a revolucionar todo el sistema político, religioso, económico… de Israel. Lo esperaban como el futuro rey o Mesías que les iba a salvar de la tiranía y abusos de las autoridades judías y de los romanos. Pero, como sabemos, no fue así….  

-         Jesús que había dedicado su vida a remediar el sufrimiento de los pobres y marginados, llego un momento en que comenzó a ser un problema para los hombres del poder que planearon su muerte. Lo mataron en una cruz. Que era la peor manera de morir, la más sufriente.

-         Aquello fue un fracaso para todos los que esperaban, especialmente para sus discípulos, que Jesús iba a ser un rey al estilo de los reyes que conocían: que impusiera sus normas, que cambiara todo el sistema de vida, que iba a quitar a los que estaban en el poder y ponerse ellos, esperaban que Jesús utilizara el poder, el control, el dinero, que fuera un revolucionario, que utilizara las armas, que cambiara la economía, la religión, la cultura…. Pero ese no fue el estilo de Jesús. Él eligió la humildad, el servicio y la entrega de sí mismo para que las cosas cambiaran. Murió como había vivido.

-         La cuestión es que a Jesús deciden matarlo en la cruz. ¿Cómo muere Jesús? Como había vivido. Lo hemos visto en los dos domingos anteriores. Jesús muere amando, perdonando, aceptando, entregándose a todos aquellos que querían acogerlo en su vida. Esto es lo que nos cuenta este breve relato del evangelio. Jesús acoge, perdona a aquel malhechor que se confía a él, pone su vida en sus manos.

-         Hoy estarás conmigo en el paraíso. Son las palabras que Jesús le dirige a aquel hombre. Paraíso es sinónimo de felicidad. Es chocante que en aquellas circunstancias Jesús le dijera: Hoy estarás conmigo gozando de la plena felicidad.  Pero esto lo que pasa cuando ponemos nuestra confianza de manera absoluta en Jesús. Él nos concede el don de la felicidad.