MARTES
Estación 10: Jesús es calvado en la
cruz
Es el dolor
de la propia cruz.
Nosotros hemos construido la nuestra,
con nuestros espacios
y tiempos de dolor.
En esos palos está resumido el esfuerzo,
el dolor que
cuesta ser cristiano,
ser persona,
intentar vivir desde los valores del
evangelio.
Es el dolor de cada día, en la lucha por aceptar que las cosas son
como son
o luchar contra frivolidad
o la falta de reconocimiento.
Para que la
cruz sea cristina, es necesario poner a Cristo,
sino será solo un peso que
cansa y agobia.
Es preciso poner a Cristo,
será un dolor que transforma, que
redime, que salva.
Si no está Cristo será solo un mal rato,
una mala suerte
No hay comentarios:
Publicar un comentario