ORACIÓN --JUEVES SANTO

ORACIÓN EN GETSEMANÍ

Se me encoje el alma, en esta noche, Padre.

No veo la luz,

Es de noche por fuera y por dentro.

La tristeza y la angustia se van apoderando poco a poco de mi alma.

Padre me siento solo.

Abandonado por ti y por mis amigos…

Solo me gustaría sentir un poco de silencio,

de paz.

Mi rostro cae en tierra,

La carga es demasiado pesada.

A veces, Padre, me gustaría protestar, quejarme, gritar:

¡Basta, ya no puedo más!

¿Por qué entregar mi vida como un criminal por este pueblo que me odia?

No puedo con tanto fracaso,

con tanto abandono,

Padre, la tristeza invade cada hueco de mi ser,

No hay nada ni nadie que pueda poner u poco de alegría en mi corazón:

Mi alma está triste, hasta la muerte.

La angustia se ha convertido en mi compañera inseparable.

Me siento desamparado,

traicionado…

Padre, ¿voy a morir, verdad?

Padre, ¿no hay otra manera de vencer el pecado que no sea entregando mi propia vida?

Padre, todos estos años, ¿han sido en balde?

¿No han conocido tu don, tu Buena Noticia?

Padre, me siento roto,

como el pan que acabo de partir y repartir para alimento de mis amigos,

estoy desconcertado,

aturdido…

Mi ansiedad es algo más que preocupación o inquietud,

es miedo ante lo que pueda ocurrir…

Padre, mis lágrimas no me dejan ver tu rostro en esta noches oscura,

negra,

en esta noche ciega de poder,

de traición, de violencia,

de absurdo, de abandono…

«¡Abbá, Padre!

Todo es posible para ti;

aparta de mí esta copa;

pero no sea lo que yo quiero, sino lo que quieres tú».

Querido Padre,

cansado, tiste, abatido,

vuelvo a ti.

Sabes Padre, que no quiero morir,

Pero estoy dispuesto  a lo que tu quieras.

Y sé que tu no quieres una muerte violenta para mi,

ni para ninguno de tus hijos e hijas,

pero nos concediste el done de la libertad,

y los hombres, mis hermanos,

ahora están planeando acabar conmigo.

Padre aparta de mí esa copa.

No me la acerques más.

Aparta de mí este cáliz de sufrimiento,

Esta sangre derramada.

Padre, ¿por qué morir tan pronto y de forma tan violenta?

¿Acaso la vida es el mayor de tus regalos?

¿Y la muerte no es la mayor de las desgracias,

pues destruye todo lo bueno que hay en la vida?

¿Por qué morir en una cruz,

De la peor de las maneras,

como un maldito,

como un apestado,

como un abandonado por ti Padre querido?

¿Esta forma de vida basada en el servicio y en la entrega

implica una forma de muerte tan despiadada y salvaje?

Padre, se me hiela la mente y el corazón,

al pensar que todo puede acabar en fracaso.

He intentado vivir entrado totalmente a ti,

A tu causa,

al proyecto de tu Reino,

Y ahora:

¿Qué va a ser del reino de Dios?

¿Quién va a defender a los pobres?

¿Quién va a pensar en los que sufren?

¿Dónde van a encontrar los pecadores la acogida y el perdón de Dios?

Padre, he reunido a este grupo de amigos

para comenzar un estilo nuevo de vivir,

al servicio de tu Reino,

acabamos de cenar juntos,

me he hecho para ellos pan y vino

para transmitirles que confíen siempre en ti; 

no estarán solos,

ya no caminaran solos; 

les he lavado los pies para hacerles verles que su grandeza depende de su entrega;

y ahora, ahora están dormidos,

no se dan cuentan,

pronto me abandonaran,

empujados por su miedo, buscarán su propia seguridad…

me dejaran solo frente a las fieras del poder…

Padre, hágase tu voluntad.

Y que nadie interprete tu voluntad como

una voluntad caprichosa, sedienta de sangre.

Tu voluntad es mi libertad.

Tu voluntad es nuestra libertad,

pues tu quieres que vivamos nuestra humanidad en plenitud,

y lo que nos hace plenos es nuestra entrega, nuestro amor,

poner nuestra confianza en que tu Bondad es más fuerte que nuestro pecado.

MI lucha no es contra ti, Padre Bueno,

mi lucha es llegar a descubrir que solo amándote

y amando a las personas,

y este es mi deseo más profundo,

puedo identificarme con tu voluntad.

Tu voluntad no es mi muerte,

sino que me entregue por amor;

Tu voluntad no es que muera en una cruz,

sino que no me defienda,

que te deje ser el Dios de mi vida.

Tu voluntad es dejarme hacer,

dejar de hacer, dejar de hablar, dejar de controlar…

Pueden juzgarme injustamente,

arrestarme, azotarme, coronarme de espinas,

clavarme en una cruz….

Solo así, sin hacer, sin hablar,

con mis manos vacías,

podré mostrar que tu eres el Dios de la vida,

que tu eres mi Padre, nuestro Padre,

solo así podré manifestar que tu amas a la humanidad hasta el extremo. Amén.

se podrá manifestar la gloria